El “manguerazo de crédito” anunciado por el BCE el pasado 22 de enero con toda probabilidad representará un balón de oxígeno importante para el sector inmobiliario y hará posible un gran año para la venta de casas y pisos. Durante un año y medio, el BCE tiene previsto comprar hasta 60.000€ por mes de deuda pública (75%) y privada (25%) a los bancos, una medida excepcional y más ambiciosa de lo esperado que tiene la finalidad de activar la economía europea y sacarla del estancamiento que padece. Este programa de compras masivas de deuda se iniciará este mes de marzo de 2015 y durará hasta septiembre de 2016. La deflación, el desempleo, la mala salud del sistema financiero y la paralización de la economía europea hacen peligrar al euro y el BCE, en contra del parecer de Alemania, ha decidido arriesgarse y tomar esta medida radical.
Al poner más euros en circulación, bajará su cotización y se facilitarán las exportaciones. Además, si bajan los intereses de la deuda pública, los costes financieros a pagar por los países europeos se reducirán y habrá algo de alivio para las sobrecargadas economías de la eurozona. “A la banca se le acaba el negocio de la compra de deuda pública y tendrá que volver a su negocio tradicional: prestar dinero.” señala el economista Gonzalo Bernardos. En este aumento del crédito por fuerza han de tener un papel importante tanto la financiación para compra de viviendas como los préstamos para reforma de viviendas. Este experto indica que “el esfuerzo económico exigido al hipotecado se flexibilizará hasta el 40% de su salario”. – 11-2-2015.